Sesión nº 74. Año X
Lez-Ama, Vivir Filmando
Mauricio Lezama Rengifo
Cali 1974 – La Esmeralda, Arauca 2019
Lo que Mauricio Lezama hacía en torno al cine, casi nadie lo supo hasta que lo mataron. Mauricio era de esos hombres tercos que en las regiones más apartadas de Colombia piensan el cine como una manera de memoria, de resistencia tal vez, de decir aquí estamos, existimos, estas son nuestras historias. Mauricio respiraba cine, por eso su pasión era la docencia comunitaria, acercar las cámaras y la narrativa a niños y jóvenes de cuanto rincón se cruzaba en su camino. Por eso se inventó el Festival de Cine de Arauca y proyectaba películas en el puente que separa y une a Colombia y Venezuela. Por eso fue Consejero Departamental de Cine. Por eso escribía guiones propios. Por eso producía ajenos. ¿Por eso lo mataron? Mauricio Lezama fue y es también el hijo, el hermano, el padre… El hombre de la eterna sonrisa que jugaba con su apellido para decirnos que el cine Lez-Ama… El loco, el terco, el krishna, el soñador, el hacedor de sueños ajenos… Ese que siempre se despedía deseándonos: #FelicesRollos.