Por tercer año consecutivo, el Cineclub Imagen Viajera organiza el Premio Quijote de la Federación internacional de cineclubs en la Muestra Internacional Documental de Bogotá, la 27MIDBO.
El jurado de la selección de cortometrajes iberoamericanos de la 27ª edición de la Muestra Internacional Documental de Bogotá (MIDBO) “Tránsitos de lo Real”, para el Premio Don Quijote (de la Federación Internacional de Cineclubes), estuvo conformado por Diogo Gomes (Brasil), Marcela Aguilar (Colombia) y Cristina Moreno (Ecuador).
Para nosotros, formar parte del festival más importante de cine documental en Colombia, fue una experiencia enriquecedora y gratificante ya que tuvimos la oportunidad de apreciar propuestas recientes que nos acercaron a realidades comunes que atraviesan al mundo contemporáneo.
La programación en general, nos pareció muy significativa, principalmente porque en cada relato se impregna la huella del tiempo y la memoria de su gente. Estuvo estrechamente ligada al territorio geográfico donde se desarrolla: Bogotá, una ciudad emotiva, llena de memorias ancestrales que conviven con la cacofonía metropolitana, moderna, con una inmensa oferta de espacios culturales, una juventud chispeante que ocupa sus calles, ávida de novedades, mientras la brisa ilumina senderos de diversos orígenes.
La selección de cortometrajes iberoamericanos conformó dos grupos, en el Programa 1 constaron: Las voces del despeñadero (Irving Serrano y Víctor Rejón /México /2025). Cavaron una tumba en mi corazón (Ulisses Arthur /Brasil /2024). Un sueño de una noche (Sandra Iglesias, Claudia de la Iglesia, Bárbara Portilla y Marina Fornies /España /2025). Si la vida me diera un deseo (Palome Gomide /Cuba /2025). En el programa 2: Buscando un burro (Juan Vicente Manrique /México, Venezuela /2024). ¿Cómo suturar la tierra? (Wil Paucar Calle /Ecuador /2024). Elogio a los fantasmas (Facundo Rodríguez /Argentina /2024). Será inmortal quien merezca serlo (Nay Mendl /Cuba /2024).
La oferta 27º MIDBO incluyó alrededor de 100 películas provenientes de 26 países, una gran selección de títulos de Colombia y de otros países. En general, las cintas exploraron búsquedas de sentido individual y colectivo, identidades en construcción, la memoria, el exilio, la explotación, el desarraigo, las raíces culturales y sus mitos. Hicieron un recorrido por archivos personales, la historia, el silencio y el olvido. Nos convocaron a reinventarnos, a replantearnos cómo habitamos el mundo, a contrastar perspectivas distintas, a una introspección colectiva, incluso a la reconciliación a través de viajes sensoriales de retornos, espacios de escucha y resistencia.
Como jurado, de antemano sabíamos que necesitábamos tener una apreciación crítica ante lo visionado. Sin embargo, quisimos alejarnos de un lugar de sentencia y decidimos conectar con la obras desde una mirada fresca que de alguna manera logre vincular las problemáticas latinoamericanas en tiempos de conflicto y nuevos paradigmas.
La 27ª edición de la Muestra Internacional Documental de Bogotá (MIDBO) “Tránsitos de lo Real”, se celebró del 29 de octubre al 7 de noviembre de 2025. La muestra se enfocó en vivir el cine como una experiencia colectiva, sensorial y reflexiva. Su denominación “Tránsitos de lo real” se justificó por la propia contundencia de la realidad que se reflejaron en las exhibiciones de cine local e internacional, en los talleres, seminarios, conversatorios, conferencias, reuniones informales entre invitados y participantes locales, que ampliaron varios aspectos de las películas. Se propiciaron diálogos sobre el cine de no ficción. El festival fue organizado por la Corporación Colombiana de Documentalistas ALADOS. Se ha consolidado en Colombia y en América Latina como un espacio de exhibición, diálogo y pensamiento alrededor del audiovisual de no ficción. Es uno de los encuentros más influyentes en Iberoamérica.
Finalmente, destacamos la excelente organización y la participación del Cineclub Imagen Viajera, no solo por su implicación en la organización de la Muestra, sino también por su apoyo financiero en la realización y entrega del Premio Don Quijote. También agradecemos el apoyo brindado a Julio Lamaña y Marcela Aguilar por su calidez, ambos grandes anfitriones. Sin duda, el cine teje amistades, hermana a nuestros pueblos. Abrazamos la experiencia de ser parte de la MIDBO.

Veredicto:
Antes del premio, hemos decidido entregar una mención especial del Premio Quijote a un corto que nos ha impresionado por la intimidad que logra al retratar un universo femenino y en condición de espera permanente del retorno del ser amado. Soledad que no impide a las mujeres protagonistas estar acompañadas de una sororidad que queda representada por un bello tratamiento fotográfico de sus cuerpos, y por medio de sus diálogos. El cortometraje nos muestra cómo una puesta en escena sencilla y con un gran trabajo de montaje, de encuadre y de fotografia, puede llegar a un resultado profundo y estéticamente potente. Por eso la mención especial del Premio Quijote es para «Si la vida me diera un deseo» de Paloma Gomide.
Y El Premio Quijote va para un corto que, en un espectacular blanco y negro, nos habla de la vida en el filo, de la presencia de la muerte atravesando diversas generaciones en una actividad tan bella como peligrosa. Una pellícula que nos habla de la vida como desafío constante y de la lucha precaria por la existència, todo ello con un trabajo formal que logra conseguir la danza de unos cuerpos voladores a través de un bello montaje y un trabajo de audio impecable. Por eso el Premio Quijote de la Federación Internacional de cineclubs es para «Las voces del despeñadero» de Irving Serrano y Victor Rejón.

