Sábado, 14 de octubre 2023. A las seis en punto iniciamos nuestra sesión de cineclub en el muelle de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño. Mientras nuestra invitada, la directora de la película, Patricia Ayala realizaba la presentación de la película, el equipo del cineclub terminaba de repartir el aguapanela y las crispetas a la sesentena de personas que llenaron el espacio.
Al finalizar la proyección el conversatorio inició con una explicación por parte de Patricia del significado del titulo y siguió con los comentarios del público. Algunas personas preguntaron por la característica híbrida de la película entre documental y ficción, otras personas comentaron sobre la importancia de ver las realidades, a menudos terribles de nuestro país, pero al mismo tiempo ofrecer puntos de vista positivos en cuanto a las posibilidades de enfrentarse a las adversidades tal y como hace la película.
Al finalizar, el público acogió con agradecimiento y aplausos la presencia de Patricia Ayala en nuestra sesión de cineclubs. La conversación continuó en una tienda de La Candelaria dónde pudimos seguir compartiendo «Puentes en el mar».
Michael aún está en el colegio. Le ahoga la aparente sobreprotección de su madre, Alicia, quien sigue acompañándolo al colegio y vigilando sus horarios y sus pasos. Pero los miedos de Alicia están anclados a la violenta realidad en la que habitan, en unas calles donde las bandas imponen la ley de la muerte, y donde las desapariciones y los asesinatos establecen una suerte de toque de queda necesarios para amanecer y sobrevivir otro día. Pero todo cuidado parece ser poco, y la rebeldía adolescente de Michael lo empujará una tarde hacia un horror irreversible. La primera incursión en la ficción de Patricia Ayala, está impregnada de esa realidad nacional que han marcado su obra como documentalista: el conflicto, la tierra, las fronteras invisibles, los amos de las calles y la vida, la violencia… Puentes en el mar captura el retrato de un fragmento de país para poner sobre la mesa un tema que nos afecta profundamente como colombianos, la imposibilidad de ser joven en ciertos contextos, unos contextos de los que es difícil salir indemne, unas calles en las que cumplir años pareciera una proeza y morir joven el pan de cada día. Una realidad en la que, quizás, la unión y el levantar la voz, sean las únicas armas posibles para derrotar al silencio cómplice que teje el miedo, a la violencia, y a las leyes impuestas por las armas y la muerte.
Luego de un primer taller sobre “Gestión, organización, y funcionamiento de cineclubes” realizado en junio de 2022 en la capital del Amazonas, en septiembre de 2023 volvimos para fortalecer los nuevos procesos organizativos de artistas que han surgido durante el último año. Realizamos un taller sobre experiencias exitosas de los cineclubes en circulación y exhibición no comercial, en el cual se socializaron experiencias organizativas del público y se identificaron propuestas concretas para los procesos que ya vienen funcionando en la ciudad, como el Cineforo CASA, espacio colaborativo que fue nuestro anfitrión. Vale la pena destacar la participación de gestores culturales, docentes y jóvenes en esta actividad.
Tuvimos además dos sesiones de cineclub con cine colombiano: La primera sesión con 5 cortometrajes: “Ramón” de Natalia Bernal, “Chakero” de Alejandro Ángel, “Mónica” de Sayuri Matsuyama, “La Maxiruana” de Marcela Aguilar y “Sin título: Tercer Movimiento” de Lamaña y Perea. En esta sesión pudimos hablar durante el conversatorio sobre las diferentes formas de producción y distribución de cine, sobre las elecciones estéticas y narrativas, y acerca de la circulación de cine independiente en Colombia. Tuvimos público infantil e intercultural que participó activamente en el cineforo.
La segunda sesión de cineclub se realizó con el documental “LEZ AMA: Vivir Filmando” de la directora Mónica Moya y del productor Emmanuel Jaramillo. Después de la proyección tuvimos un conversatorio con el consejero audiovisual del departamento del Amazonas Daniel Daza, quien nos contó de su amistad con Mauricio Lezama y nos explicó la organización y funcionamiento de los Consejos Departamentales de Cine en Colombia. La historia de Mauricio Lezama fue muy inspiradora para los asistentes, pues se identificaron con su labor y con las dificultades de la gestión cultural en estos departamentos del sur de Colombia.
Desde el Cineclub Imagen Viajera estamos muy felices de haber podido colaborar en el surgimiento y fortalecimiento de este proceso organizativo y les deseamos lo mejor.
Queremos agradecer a todos quienes hicieron posible la realización de esta actividad cultural y educativa:
A directoras y productoras quienes nos facilitaron sus películas. Natalia Bernal, Alejandro Ángel, Sayuri Matsuyama, Marxe Aguilar, Julio Lamaña, Mónica Moya, al productor Emmanuel Jaramillo y las productoras: Pescadito Films, Armadillo Media y Yagé Producciones.
Al Cineforo CASA por la organización y gestión de toda la actividad (Andrés, John y Gabriel).
A “Se Arrienda, Espacio Creativo” (antiguo Teatro Pinocho) por el espacio.
A la Floristería Marilyn por facilitar la silletería.
A Gabriel Daza consejero audiovisual del Departamento del Amazonas.
A Marcela Aguilar del Cineclub Imagen Viajera y miembro de la FICC por haber propuesto y liderado estas acciones de fortalecimiento al cineclubismo en Leticia.
Al público diverso e intercultural que de manera entusiasta y comprometida, asistió y retroalimentó las actividades.
En la escena Queer de Medellín los espectrofílicos llenan los callejones y rincones oscuros de la ciudad con sexo, drogas y vicios desenfrenados. No hay un más allá cuando los espectros corrompen a los jóvenes sin esperanza. ANHELL69 explora los sueños, dudas y miedos de una generación aniquilada, y la lucha por seguir haciendo cine. Desde su estreno en Venecia, ANHELL69 no para de cautivar al público de los más de 60 festivales en todo el mundo en los que hace presencia.
PREMIOS INTERNACIONALES
– Premio Santiago Festival Internacional de Cine – SANFIC, 2019.
– Apoyo a narradores y documentalistas de comunidades sistemáticamente excluidas, Tribeca All Access, 2020.
– Paloma de Oro, Competencia Internacional, DOK Leipzig, Alemania, 2022.
– Mención Especial del Jurado, Semana Internacional de la Crítica de Venecia, Italia, 2022.
– Premio Mario Serandrei – Hotel Saturnia, Semana Internacional de la Crítica de Venecia, Italia, 2022.
– Premio a la película más innovadora, Club de Cine de Verona, Semana Internacional de la Crítica de Venecia, Italia, 2022.
– Mejor ópera prima, Zinebi – Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de Bilbao, España, 2022.
– Mención del jurado SIGNIS, Festival Internacional de Cine Documental de Buenos Aires – FIDBA, Argentina, 2022.
– Premio Feisal, Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, Cuba, 2022.
– Premio a la Mejor Película, Márgenes – Festival Internacional de Cine, España, 2022.
– Premio FIPRESCI a la Mejor Película, Festival Internacional de Cine de Gijón, España, 2022.
– Mención Especial, Rencontres International du Documentaire de Montréal (RIDM), Canadá, 2022.
– Mención Especial en la Competencia Latinoamericana y Mención Especial a Mejor Director Latinoamericano hasta los 35 Años, Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, Argentina, 2022.
– Golden Dove, DOK Leipzig – Festival Internacional de Cine Documental y de Animación, Alemania, 2022.
– Premio a Mejor Documental, Transilvania International Film Festival, Rumania, 2023.
– Premio a Mejor Película, Festival de Cine Espacio Queer, Argentina, 2023.
– Premio a Mejor Documental, International Film Festival Innsbruck, Austria, 2023.
– Premio Internacional de Documental, ethnocineca – International Doc. Film Festival, Austria, 2023.
– Prix Sfcc De La Critique, Cinélatino Rencontres de Toulouse, Francia, 2023.
– Premio Internacional, Tempo Documentary Festival, Suecia, 2023.
– Premio Lobo Marino, Festival Internacional de Cine de Punta del Este, Uruguay, 2023.
– Mención Especial, Depth of Field competition, Docaviv Film Festival, Israel, 2023.
– Mención Especial, DOXA Documentary Film Festival, Canadá, 2023.
Nuestro compañero en el cineclub nos deja la crónica de su paso por Chile
Del 6 al 13 de agosto de 2023 tuvo lugar el “Laboratorio de Capacitación de Cineclubes chilenos y espacios de exhibición audiovisual, gestión, promoción y mediación”. La iniciativa fue impulsada por la Asociación de Cineclubes de Chile en colaboración con la Cineteca de la Universidad de Chile. Tuvo lugar en la ciudad costera de San Antonio a una hora de Santiago de Chile.
Más de 70 personas participaron tanto desde la organización cómo por parte de los asistentes cineclubistas que llegaron del norte, centro y sur del país. Hubo también la posibilidad de participar de forma virtual.
Tuve el honor de formar parte del equipo docente juntamente a un grupo de personas como Judith Silva, historiadora e investigadora del cine; Luis Horta, académico de la FCEI de la Universidad de Chile y coordinador de la Cineteca de la Universidad de Chile; Susana Díaz, documentalista y docente; Juan Carreño, escritor y cofundador de la Escuela Popular de Cine; Valentina Ávila, coordinadora de la Asociación de Cineclubes de Chile y encargada de mediación y públicos de la Cineteca de la U. de Chile; y Vladimir Garay, encargado de incidencia pública de la ONG Derechos Digitales. En la parte logística contamos con el apoyo de la Producción General de Tamara Vallejos y el apoyo técnico de Natalia Ibarra.
Panorama chileno
Desde el primer momento, a la llegada al Hotel Puerto Mayor en san Antonio sentí la buena vibra cineclubista, esa que hace que la atmósfera sea la ideal para un evento de esta magnitud. Ya desde la primera cena aparecen las primeras conversaciones, el interés mútuo por el otro, también las primeras risas, conocer los nombres del grupo… Cineclubismo es paradójicamente una actividad solitaria que comparten miles de personas en el mundo. Un grupo de dirigentes cineclubistas en una pequeña ciudad pueden sentirse solos y hasta poner en duda lo que estan haciendo con tanto esfuerzo. Pero al encontrarse con sus pares, se refuerza el sentimiento de pertenecer a algo más grande, a un movimiento que llamamos cineclubismo.
El laboratorio estaba diseñado para dar herramientas que puedan fortalecer a las personas que asistieron al encuentro. Desde conceptos generales sobre lo que significa un cineclub, pasando por un acercamiento a la historia del cineclubismo en Chile, Latinoamérica y el mundo hasta llegar a sesiones enfocadas en la curadoría de cine realizado por mujeres, cine chileno y cine latinoamericano. También a aspectos legales con los que hay que trabajar y al ejercicio cineclubista con poblaciones vulnerables. Herramientas importantes de contenido formal pero que quedan en segundo término desde el momento que el proceso se convierte en autoformación. Dónde los y las cineclubistas participantes al laboratorio mostraban su entusiasmo proponiendo ejercicios de presentación y debate con cortos que ellos seleccionaron o en el diseño de sus propios proyectos que fueron trabajando toda la semana y que compartieron con todas y todos el último día. Ese entusiamo (etimológicamente, “tener a Dios dentro”), es el que construye cineclubistas en todo el mundo. Por eso es que valoro mucho el esfuerzo del equipo organizador para que las cosas pasaran así. Sin jerarquías académicas, desde lo horizontal que propone un cineclubismo fraterno, en la base de nuestras relaciones con el público.
Un término rondó por las sesiones de trabajo que me llamó la atención: la Pornomiseria. Una denominación muy de los años 70 y que definía a películas documentales latinoamericanas que ganaban premios en Europa. Pero que ponían a la miseria como objeto espectacular que complacía la conciencia del púbico del otro lado del océano pero que eran simples y superficiales muestras de la miseria del continente. Me sorprendió la relectura que se hizo desde el punto de vista del cineclubismo en Chile que se preocupa por la ética en las actividades que organiza. El término estuvo presente al menos en tres de las sesiones y estoy seguro que fue fondo de conversación en los espacios de compartir en el hotel, en los almuerzos… Me hace pensar en cómo el cineclubismo latinoamericano, muy diferente al de otras partes del mundo, vive muy de cerca realidades duras a las que se debe enfrentar en su quehacer cineclubista. Preguntarse por ese rol ético también nos hace ser diferentes en un mundo en el que los escrúpulos brillan por su ausencia.
El cineclubismo es la apropiación del cine por parte de los públicos. Es la construcción de un sentimiento de pertenencia al publico organizado. Todo el tiempo sentí que estábamos muy enfocados todos y todas en la importancia del público como eje central de nuestra actividad. ¿Qué contenido les proponemos? ¿Cómo dialogar con los públicos? ¿Cómo hacer que el público participe en el debate? ¿Cuál es el rol del cineclubista ante el público? Muchas preguntas, pocas certezas. El cineclubismo es un ejercicio del “hacer”. No es facil proponer modelos. La heterogeneidad es una fortaleza que también muestra una debilidad y es que cada cual debe construir su cineclub entorno a su comunidad. Y cuanto más integrado estés en tu comunidad, mejor te irán las cosas. El público, que gran tema.
Antofagasta, Valparaíso, Santiago, San Antonio, Región de los Ríos (Araucanía), Parral, Arica, Atacama, Villarica, Temuco, Cineclub UCN, Cineclub UAH, Microcine Raíces, Subterfugio cineclub, Festival itinerante la Ventana, Cineclub la Ruca, Cineclub Sala Zazie, Verzul laboratorio, Colectivo de cine las encinas, Cine y necropolítica, Cineclub Alhambra, Cineclub del Centro Cultural Camilo Mori, Cineclub Alicia Vega, CCC Cineclub, Cineclub Postdata, El Delirio Cineclub, Cine para todes, Cineclub Meripeuco, Cineclub el Séptimo sello. Lugares y nombres que resuenan ya en el futuro del cineclubismo en Chile y que proyectan al futuro una red sólida de la mano de la Asociación de Cineclubs de Chile.
Panorama Latinoamericano
Pienso en el buen momento del cineclubismo en Latinoamérica. Al gran trabajo de la red de cineclubes del Ecuador que lleva años ya construyendo un diálogo con los públicos, especialmente los infantiles y adolescentes, al gran trabajo de PROCINE en la Ciudad de México con el gran apoyo allá del Cineclub Bravo y que ha visibilizado este trabajo a veces invisible a través, por ejemplo, de una cartografía de los cineclubs de la Ciudad de México. También cierto resurgir del gigante brasilero con el Conselho Nacional de Cineclubes que está organizando muy buenas acciones online para todo el continente o también el Seminario de Cineclubismos Latinoamericanos que lidera el Cineclube Ó Lhó Lhó con participación de varios países de la región con varias mesas online. En Colombia se consolida la Red de Cineclubes de Bogotá y Cundinamarca y su presencia se hace patente en instancias oficiales como encuentros sobre exhibición organizados por el Ministerio de Cultura. Cuba sigue firme con la Federación de Cineclubes de Cuba y su presencia en el Festival de La Habana dónde se otorga el Premio Quijote de la Federación Internacional de Cineclubs. En Colombia por primera vez también llega este premio Quijote del cineclubismo internacional con la alianza de la FICC con el Cineclub Imagen Viajera y la Muestra Internacional Documental de Bogotá MIDBO. No tengo un panorama completo de todo el continente pero siento como el cineclubismo en Latinoamérica sigue su propio camino. Quizá no tan concentrado en la apreciación cinematográfica como en otros continentes, sino muy enfocado en el trabajo con las comunidades y con un fuerte enfoque desde lo social. Chile marca un camino a seguir y es el de la organización de encuentros de formación, bien organizados, con un nivel de contenido muy alto y con un enfoque de futuro para la consolidación de una red de cineclubes fuerte en el pais. El cineclubismo latinoamericano se mueve!!
Julio Lamaña
juliolamana@federaciocatalanacineclubs.cat
En nuestro espíritu viajero e itinerante nos vamos de nuevo a Leticia para impartir un taller y realizar algunas proyecciones. Se lleva a cabo en el proceso de fortalecimiento de espacios de cineclubs y lugares de proyecciones alternativos como CINEFORO CASA que proyecta mensualmente en Leticia.
Los cineclubes bogotanos desde 2020 organizamos el Premio Hernando Salcedo Silva(considerado el padre del cineclubismo en Colombia) a la mejor película colombiana del año y escogida por los cineclubes de Bogotá.
El premio se entrega con la proyección de la película en la Cinemateca de Bogotá. Han ganado el premio anteriormente «Homo Botanicus» de Guillermo Quintero y «Los Conductos» de Camilo Restrepo. Este año la película premiada ha sido «La Jauría» de Andrés Ramírez Pulido.
Este sábado 17 de junio 2023 nos llegó frío y lluvioso. Ni modo de realizar la sesión en la calle como es habitual. Nos dispusimos dentro del Muelle de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño y muy amablemente el personal técnico se encargó de acondicionar el espacio para la proyección. Mientras ya teníamos preparadas las crispetas y la olla con el aguapanela, (indispensable) para el frío bogotano, estaba lista en la panadería cercana.
Con miedo a que el frío y la lluvia resultara demasiado para nuestro público, temíamos lo peor. Pero poco a poco fue llegando y llenamos casi por completo el espacio con más de 50 personas asistentes. El debate fue rico ya que las personas del público empezaron a hacer conexiones y a poner a dialogar los cortos (que no tenían ningún nexo temático, solo que estaban realizados por miembros del cineclub). Y sin embargo el público vio relaciones entre los cortos como que tocan la conexión campo-ciudad o que presentan reflexiones en positivo sobre las condiciones de la educación, del medio ambiente o del trabajo. El público pues, tuvo su espacio de reflexión y diálogo con los y las realizadoras presentes. Esta actividad se engloba dentro de las actividades de CINEANDO
Nuestro único perrito presente en esta ocasión, Omimi, se portó como un caballero.
CLOSE es un elegante, poético y empático estudio de la juventud por el aclamado guionista y director Lukas Dhont. Léo y Rémi, de trece años, son inseparables; mejores amigos, tan unidos como hermanos. Sin embargo, al comenzar un nuevo curso escolar, las presiones de la adolescencia ponen a prueba sus lazos con consecuencias inesperadas y trascendentales. Con las increíbles interpretaciones de los debutantes Eden Dambrine y Gustav De Waele, la evocadora segunda película de Dhont es una historia coming of age profundamente conmovedora que tendrá un impacto duradero.